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La Colombiana

  • Foto del escritor: Juan Sebastian Monroy Gutierrez
    Juan Sebastian Monroy Gutierrez
  • 18 mar
  • 2 Min. de lectura

En el último mes, las playlists de los colombianos han vibrado con La Colombiana de Juliana Velásquez, una canción que no solo trae el ritmo inconfundible de la cumbia, sino también un homenaje al alma fuerte, auténtica y luminosa de la mujer colombiana.

En LATIN SYR, nos inspiran las personas que viven sin miedo a ser ellas mismas.


Creemos en aquellos que, con amor propio, rompen barreras y convierten sus sueños en realidad. Porque cuando alguien se abraza tal como es, no hay límites que lo detengan.


En Nueva York vive una colombiana que encarna esa esencia. Su nombre es Laura Pantoja, y más que una maquilladora, es una creadora de belleza y confianza. Su talento ha hecho historia en Colombia y, sin duda, lo hará también en Estados Unidos.



Hay quienes descubren su pasión desde pequeños y otros que la encuentran en el camino. Laura siempre supo que quería ser grande, aunque en su infancia en Ipiales, Nariño, no tenía claro cómo lograrlo. Con una maleta llena de sueños, llegó a Bogotá a los 16 años, enfrentando la intensidad de la gran ciudad y las lecciones que trae la vida. En medio de su trayecto, vivió una de las pérdidas más profundas: la partida de su padre. Un golpe que le enseñó el verdadero peso de la resiliencia.


Ante el dolor, tuvo dos opciones: quedarse atrapada en la duda o apostar por su destino. Creo que para ella solo había una opción.


Dicen que casi la mitad de las personas no ejercen la carrera que estudian. Laura es parte de esa estadística. Aunque se formó en diseño de moda y dio lo mejor de sí, en el fondo sabía que su verdadera pasión estaba en otro lugar. Llegó a dudar de su propio talento, pensando que sus manos no eran creadoras. Pero la vida le mostró que, en realidad, estaban destinadas a algo más grande: resaltar la belleza que cada persona lleva dentro y ayudar a otros a redescubrirse frente al espejo.



A veces, la mente nos llena de dudas, pero Laura demostró que esas voces pueden silenciarse y que cada uno de nosotros tiene el poder de escribir su propia historia. Hoy, es una maquilladora de excelencia, pero más allá de eso, es alguien que transforma, inspira y deja huella en quienes la rodean.


La Colombiana… la mujer que avanza sin miedo, porque su esencia siempre la guía.La Colombiana… la que brilla sin importar en qué parte del mundo esté. La Colombiana… la que cae, se levanta y sigue adelante con más determinación. La Colombiana… la que conquistó Bogotá y hoy se abre paso en la Gran Manzana.


Esa colombiana es Laura Pantoja, una mujer que lleva en su esencia el orgullo de su tierra y sus sueños.



Gracias por ser una inspiración para todos los colombianos.






 
 
 

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